FACULTAD DE CIENCIAS EXACTAS, FÍSICAS Y NATURALES

La iniciativa de postularnos como alternativa para el gobierno de la FCEFN, surgió de un importante grupo de personas de distintos estamentos, motivados por la convicción de la imperiosa necesidad de producir una profunda reformulación de los procedimientos y prácticas institucionales empleadas en su gestión. Es una inquietud que viene creciendo en el tiempo y que expresan, abierta o reservadamente, sectores cada vez más amplios.
La aspiración es la de instrumentar un modelo de gestión para una Facultad en la que todos sus miembros tengan la posibilidad de desarrollar sus potencialidades y progresar, sin otros condicionamientos que su propia motivación y la normativa vigente. Para eso, hay que garantizar la igualdad de oportunidades y de trato, sin discriminaciones de ningún tipo incluyendo la pertenencia, afinidad o apoyo a personas o a grupos. Hay que jerarquizar, honrar, dignificar nuestra condición de universitarios. Los miembros de la institución deben poder desarrollarse, volcar sus capacidades y evolucionar en un ambiente de respeto, equidad y ausencia de todo tipo de presiones o violencia moral, independientemente de sus adhesiones o apoyos expresados en las épocas electorales.
La diversidad de criterios y la pluralidad de opiniones deben ser valorados por su capacidad enriquecedora del debate y, por lo tanto, como factor de crecimiento y desarrollo institucional y no como causa de exclusión. Esto en salvaguarda tanto de los legítimos derechos de participación, crecimiento y realización personales, como de los objetivos institucionales, al posibilitar que no se desaproveche el aporte de muchos de sus integrantes, por haber sido marginados o excluidos de toda convocatoria u oportunidad.
Solo así, además, podremos superar el estancamiento en que la institución se encuentra.
Nuestra propuesta no se basa en un catálogo de promesas de cosas a hacer; nos parece poco creíble ofrecer en estos momentos un repertorio de proyectos y de soluciones a todos los problemas, porque entendemos que son promesas de dudosa seriedad que se formulan para ganar una elección y que luego pueden o no ser cumplidas. Tenemos muchas experiencias al respecto.
Preferimos, en cambio, postular un conjunto de principios institucionales como basamento de la gestión:
1) Constituyen pilares básicos, por ser objetivos sustantivos, la búsqueda permanente de la elevación de la calidad académica; el mejoramiento continuo del proceso de formación de profesionales; la revisión y actualización de planes de estudio; la formulación de políticas para la investigación y la extensión y el fortalecimiento de estas actividades en el marco de esas políticas; la aplicación de políticas apropiadas de ingreso a las carreras y la implementación de medidas dirigidas a mejorar las tasas de permanencia; la capacitación y perfeccionamiento permanente de los recursos humanos de la Institución.
2) Los intereses y objetivos institucionales deben anteponerse a cualquier otra consideración en la toma de decisiones, por encima de intereses corporativos, sectoriales o personales, sin perjuicio del derecho a la defensa de éstos.
3) Hay que posibilitar e incentivar la más amplia participación en el tratamiento y resolución de las problemáticas específicas de cada unidad o sector y de los asuntos que involucren a toda la Facultad, tanto a través del Consejo Directivo y sus comisiones como aplicando también mecanismos dinámicos y ejecutivos de gestión, que permitan la participación de todos los que puedan contribuir a la mejor decisión en el menor plazo posible.
4) Debe respetarse el margen de decisiones que compete a cada Unidad, evitando el autoritarismo y la discrecionalidad sistemática del nivel superior y reconociendo y respetando, en cambio, las atribuciones de las autoridades de los niveles intermedios en la toma de decisiones dentro de su ámbito de competencia.
5) La asignación de recursos y el otorgamiento de mejoras, beneficios u oportunidades a docentes, investigadores, estudiantes o personal de apoyo debe hacerse empleando exclusivamente elementos de juicio objetivos, tales como prioridades académicas y méritos y garantizando equidad y transparencia.
6) Debe estimularse el espíritu crítico en los estudiantes, admitiendo la diversidad de ideas sin preferencias ni discriminación.
7) Hay que fomentar la participación estudiantil en proyectos de investigación y extensión, como un complemento importante de su formación.
8) Se debe prestar permanente atención a las condiciones de los lugares de trabajo y provisión de los recursos necesarios para todo el personal y tipos de funciones: docentes, investigadores, personal de apoyo y todo otro que desarrolle actividades relacionadas con los quehaceres específicos de la Facultad.
9) Deben continuarse todos los proyectos, procesos o actividades que se encuentren en desarrollo y que sean inobjetablemente convenientes o beneficiosos para los intereses de la Facultad.
10) Hay que erradicar de la Universidad el favoritismo y el clientelismo y bregar por el respeto incondicional de los principios de igualdad de oportunidades, apego a las normas que la rigen y transparencia de los actos de gobierno, que deben ser ampliamente publicitados.
Tenemos ahora la oportunidad de cristalizar esta aspiración, que no se va a repetir hasta dentro de cuatro años. Llamamos a la comunidad de la FCEFN a no perderla. Es el momento de pronunciarse, de expresar y hacer efectiva la voluntad de cambio. Después de estas elecciones podemos estar frente a otros cuatro años de continuidad y estancamiento o frente a una oportunidad de modificar sustancialmente las cosas, para bien de la Institución y de sus integrantes. Depende de nosotros.
Hagamos posible este cambio necesario. Tenemos la capacidad y la experiencia de gestión que hace falta, conocemos la Facultad en la que estamos hace más de 20 años, estamos preparados y en condiciones de afrontar la responsabilidad. Sólo hay que tomar la decisión. ¡Ayúdennos a lograrlo!