Es por “Bonavento”, un vino elaborado por estudiantes de la Escuela, que fue distinguido en el marco de la XXXIV Cata de Vinos Concurso Nacional “Argentina Tierra de Vinos” 2022, organizada por el Ministerio de Producción y Desarrollo Económico de la Provincia, apoyando al Consejo Profesional y Centro de Enólogos de San Juan. Participan en la organización la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR), la Cámara de Bodegueros y la Cámara Vitivinícola de San Juan.
Por Marcela Ormeño
El prestigio de los institutos preuniversitarios antecede y acompaña a estas instituciones desde larga data. Y ese prestigio hace que estos colegios secundarios sean los más codiciados a la hora de elegir una formación.
Esta fama es absolutamente fundada, porque los colegios preuniversitarios de la Universidad Nacional de San Juan siempre están demostrando que su enseñanza otorga las herramientas suficientes para que sus estudiantes puedan enfrentar los desafíos de una educación superior o a la hora de elegir algún oficio.
Y en este sentido recientemente la Escuela Industrial “Domingo Faustino Sarmiento”, a través de sus prácticas formativas y profesionalizantes, se ha situado en el top de presentaciones, competencias y demostraciones.
En esta oportunidad abordaremos el caso de “Bonavento”, un vino que fue elaborado por las y los estudiantes de 7mo año de la escuela mencionada, especialización Industrias de Procesos, que se presentó en la 34° Cata de Vinos de San Juan Concurso Nacional “Argentina Tierra de Vinos” 2022 y obtuvo la calificación de Medalla de Plata.
Para hablar del tema dialogamos con el Profesor Sergio Estévez y los estudiantes Jeremías Mingorance y Fabrizio Migani.
Este producto fue elaborado dentro del espacio curricular Tecnología de los Alimentos de la Escuela Industrial, en donde todos los años se elabora un vino como parte de las prácticas formativas. Sin embargo, este año, el Ing. Sergio Estévez a cargo del taller procesos industriales del que también forma parte el Prof. Gabriel Almada y la Téc. Estefanía Verón, les propusieron a sus estudiantes como desafío, presentar el vino, en la XXXIV Cata de Vinos 2022. A este proyecto también se sumó la profesora Clara Graffigna, quien trabajó con los alumnos el diseño de etiquetas.
El responsable de esta formación Sergio Estévez expresó al respecto: “Esto es muy interesante como práctica profesionalizante, les permite que ellos vean no sólo el área química, el proceso específico, los parámetros de control, sino que diseñaron un producto global, que han obtenido un producto totalmente logrado. Posteriormente se presentaron a una evaluación donde había un jurado que no los conocía, por lo que la evaluación fue totalmente imparcial. Los evaluadores degustaron de manera anónima, recibieron una muestra del vino, con la información básica sobre varietal, año, etc. De esta manera los alumnos con su vino Bonavento obtuvieron la calificación de medalla de plata”.
“La intención -siguió diciendo el docente- es que los alumnos tengan la posibilidad de tener algunas vivencias como las que tienen los profesionales del sector privado que elaboran productos, y luego esos productos son sometidos a evaluaciones. Es muy meritorio, porque participaron en las prácticas habituales del sector. Esto si se extiende al plano comercial, y si a ellos les toca estar en este rubro, este puntaje les abrirá puertas comerciales”.
Por su parte los estudiantes manifestaron que esta experiencia les resultó muy importante porque empezaron con el vino inclusive antes de que inicien las clases. Fueron a recibir la uva, luego hicieron los controles, y todo ese esfuerzo los fue compenetrando. Finalmente ver este producto terminado y que sea premiado les resultó: “lo mejor, nos sentimos muy orgullosos”. “Cada uno de nosotros -siguió contando uno de ellos- ha participado en esto desde que el profesor nos hizo la propuesta. Somos 16 compañeros, y aunque uno ideó el nombre, el otro hizo la etiqueta, los otros se pusieron a pensar en el envase, los análisis del producto, etc., pero en cada aspecto todos pudimos aportar y coincidir en el producto que queríamos. La producción del vino, fue un esfuerzo de todos, en donde cada uno aportó desde un sector distinto. Fue una experiencia gratificante, llevó mucho trabajo, y la premiación significó que ese trabajo valió la pena, y se aprendió mucho en el proceso”
El docente a cargo dijo que con esta formación recibida en la práctica la intención es “brindarles a los chicos la posibilidad que puedan ver en qué parte del proceso se pueden encontrar cómodos desempeñándose. Es genial que como escuela les podamos brindar las posibilidades de conocer en que facetas se encontrarán trabajando”
Finalmente, Estévez destacó que, en la planta de procesos industriales de la Escuela Industrial, prácticamente están abordando el 100 por ciento de las economías agroindustriales. “Tenemos la micro bodega para elaborar vinos, que es muy tecnológica, estamos elaborando quesos, aceite de oliva, conservas de frutas y hortalizas, y ahora estamos tratando de incursionar en los productos cárnicos”.
El Taller de Procesos Industriales
Dentro de los talleres con los que dispone la Escuela Industrial Domingo Faustino Sarmiento, se encuentra el Taller de Procesos Industriales, en donde estudiantes del Departamento de Química en sus dos especialidades llevan a cabo sus prácticas formativas y profesionalizantes.
El taller funciona en una planta industrial cuyo edificio fue construido luego del terremoto de 1944 que sufrió la provincia de San Juan. En un comienzo la planta industrial pone en marcha la planta extractora de aceite de que actualmente forma parte del equipamiento del museo de la escuela. Con el pasar de los años se incorporaron otros equipos, entre ellos una caldera a leña que fue con la que se comenzó la producción de dulces y conservas. Con el pasar de los años se fueron incorporando otros equipos como concentradores a cielo abierto, un concentrador a vacío. Dentro de las más recientes adquisiciones la planta recibió un equipo modular de última generación para la extracción de aceite de oliva. En el año 2016 se pudo adquirir tanques de inoxidables para la micro bodega destinada a la elaboración de vinos.
En la actualidad en el taller de procesos industriales se están llevando a cabo varios procesos, entre ellos la producción de aceite de oliva, conservas de frutas y hortalizas y algunos productos fermentados como la elaboración de vinos, producción de quesos y elaboración de aceitunas verdes fermentadas.
A partir del año 2021 se incorporaron algunos procesos no alimenticios como fabricación de shampoo sólido, cremas de mano y jabones de mano. Estos procesos son abordados por docentes de los otros espacios curriculares y apuntan ir dando al estudiante una visión más amplia participando en procesos no necesariamente alimenticios.