El arte actual conmueve no sólo por su belleza. Las obras y proyectos artísticos tocan al espectador desde el rechazo, la participación en la obra, la empatía, la acción. ¿La educación sistemática se ocupa de brindar las condiciones necesarias para que el arte sea enseñado de este modo?
El mundo artístico, el referido específicamente a las artes visuales, parece estar bastante alejado de las instituciones educativas, casi son dos mundos paralelos que no se tocan. Es posible que así sea ya que los artistas no producen para que sus obras sean objeto de la enseñanza. Sucede lo mismo con la investigación científica, lo que ésta produce tiene otros fines como, por ejemplo, el de ampliar el campo de conocimiento, de comprensión y explicación del mundo, de sus diferentes fenómenos, mejorar la calidad de vida de los seres humanos. Pero sucede que desde hace ya tiempo, la sociedad ha determinado en sus políticas educativas que las producciones artísticas, culturales y científicas son necesariamente los contenidos de la enseñanza escolar en todos sus niveles, ya que con estos conocimientos junto con el acceso a la información, el desarrollo de capacidades creativas, investigativas, relacionales y otras tantas, todos los ciudadanos tendríamos las bases para la sociabilidad, la vida en común –comunitaria-, la capacidad de comprender el mundo en que vivimos y junto a esto la capacidad de transformarlo. Es así que, la escuela debería garantizar el acceso de todos los ciudadanos a las producciones culturales y científicas.
Durante el siglo XX y hasta la actualidad, los productores artísticos han profesionalizado la actividad artística, sus obras dejaron de ser retratos u ornamentos para ser objetos de pensamiento y reflexión, incluyendo al espectador como figura indisoluble de la obra. El arte actual conmueve no sólo por su belleza, como antaño, sino que las profundas transformaciones sociales ocurridas en el pasado siglo condujeron a un necesario cambio de sentido en el arte. Los resultados finales, las obras y proyectos artísticos tocan al espectador desde el rechazo, el repudio, o la participación en la obra, la empatía, la acción… más que desde la belleza.
Cabría preguntarse ¿la educación sistemática se ocupa de brindar las condiciones necesarias para que el arte sea enseñado de este modo?; si no es así, ¿qué aprenden niños y adolescentes en relación con el arte?; lo que aprenden ¿les permite comunicarse con las obras de arte actuales?. Entonces ¿qué función cumple el arte en la escuela?. ¿Es el aprendizaje artístico una herramienta de conocimiento y transformación de las vidas de los estudiantes? Las preguntas siguen en cantidad, pero rescato la siguiente: ¿Quién se beneficia con la selecta participación en el mundo del arte?
Obra: "Juanito Laguna aprende a leer"
1961. Antonio Berni.
Óleo y collage sobre tela, 200x300 cm
Juanito Laguna aprende a leer sentado en un cajón sobre la tierra, encorvado sobre sus rodillas sostiene un libro, su maestra es una persona apenas mayor. En el fondo una pared desgastada, agrietada, una ventana remendada está sostenida por sogas. No hace falta mucho más para entender a qué ambiente se refiere.
Conocemos aquella frase que sostiene que el conocimiento da poder, pero creo que más que nada el conocimiento libera, la alfabetización, la lectura permite construirnos en el mundo, permite a cada uno de nosotros nombrarlo, interrogarlo, modificarlo. Juanito y sus amigos están aprendiéndolo, eso quizás les ayude a salir de la pobreza, de ese mundo que Berni nos muestra hecho de telas, latas, sogas, despojos de las urbes.
El arte puede decir, mostrar, significar e interpelar los hechos y acontecimientos, los espectadores pueden hacerse preguntas sobre el estado naturalizado de las cosas, encontrar nuevos significados y quizás generar soluciones.
Los dispositivos artísticos que permiten deconstruir el estado de las cosas se enseñan y se aprenden, también se inventan nuevos, es por eso que la enseñanza artística debería estar fuertemente presente en nuestras escuelas, para ayudarnos a inventar un mundo mejor para todos.